PEnsÄ qUE esTAs siENdo ....

viernes, 21 de agosto de 2009

el viejo baba




Esa vez, te vi y no hiciste más que encantarme, como seguro lo hacías con toda aquella cosa que respirase, como lo hace ese lindo mandala que vi en el faldeo de ese inolvidable cerro.
Me conquistaste, como sólo una linda utopía puede conquistar al más rebelde sentir adolescente.
En el más fresco de los ríos, puedo sumergirme cuando te hablo, a pesar de las corrientes a pesar que sólo sea un hilo el agua que baja...
Así, lográs convencerme, pero no tan rápido como lo logró esa luna blanca, aquella noche en el río, y no tan rápido como para que no lo descubriera ni tan lento como para que no lo notara.

Sólo bastó tantico así, para que me detuviera a mirarte y ver en los ojos del inofensivo viejecito, a la más tierna de entre todas las miradas.
Como no olvidar a alguien que disfruta sentarse bajo aquel paraíso en otoño, a alguien que cuando te besa contagia convicción.

Te pareces al sueño de un niño, cuando también la vigilia es sueño.
Te conozco el caminar pausado y disfrutando cada paso, ese caminar al que tus piernas se negaban, de ese caminar no hablaba, sino aquel capaz de llegar a ese mundo mejor y más aún, posible.
Sos realidad y sos sueño.
Sos convicción y sos utopía.
Sos otoño y primavera.



Sanavirones
8 de mayo 2008